REACCIÓN FINAL EN MÚNICH

El Real Madrid cae 3-2 con el Bayern en la ida de los cuartos de final de la Copa de Europa

Hugo Sánchez con guantes. El mexicano Hugo Sánchez con guantes. Es la imagen que me viene a la cabeza a la hora de evocar aquel encuentro que disputaron Bayern de Múnich y Real Madrid el 2 de marzo de 1988. Debía de hacer un frío terrible aquel día en Alemania para que uno de los 'machos' del equipo saltara al terreno de juego con guantes. Hasta cinco grados bajo cero, según algunas crónicas, y restos de nieve alrededor del campo. El césped, sin embargo, estaba en buenas condiciones, algo ideal para la disputa de un encuentro de Copa de Europa. En concreto, la ida de los cuartos de final de la edición 1987-88. 

El equipo de Leo Beenhakker se encontraba de nuevo con el conjunto alemán, su verdugo en la anterior edición de la temporada 1986-87. Un año después la expedición blanca regresaba al terreno de juego en el que había hincado la rodilla con aquel doloroso 4-1 en el partido del famoso incidente de Juanito con Matthaus. En esta edición, sin embargo, las cosas parecían ir muchísimo mejor en Europa. El Real Madrid venía de eliminar al Nápoles de Maradona y al Oporto, vigente Campeón de Europa, como ya recordé en su momento aquí en 'Historias del Real Madrid'. Y después de dejar en la cuneta al Campeón tocaba medirse con el Subcampeón. Una eliminatoria con posibilidad de revancha para los madridistas, sin duda...

Ya desde el pitido inicial se pudo comprobar que el Bayern iba a salir a tratar de hacer daño desde el minuto 1. El Madrid entró algo frío y el primer cuarto de hora fue de claro dominio loca, con alguna ocasión muy clara como un remate de cabeza de Wolfhart nada más arrancar el choque. Afortunadamente el Madrid se fue sacudiendo el dominio local con el paso de los minutos y poco a poco se fue asentando mejor sobre el césped del Estadio Olímpico, en el que se apreciaban algunos pequeños restos de nieve. Butragueño protagonizó las acciones de mayor peligro por parte de los blancos con un disparo y un pase a Hugo que el mexicano no consiguió aprovechar. El Buitre incluso fue objeto de un más que posible penalti que el colegiado, el italiano Paolo Casarín, no concedió. En cualquier caso, se había equilibrado la balanza del choque.

Sin embargo, las cosas se torcieron por completo en las postrimerías del primer tiempo. Un saque de esquina desde la izquierda originó el primer tanto del partido para los alemanes. El balón fue rechazado por la defensa del Real Madrid pero un germano, justo al borde del área y de espaldas, devolvió el balón hacia atrás para que Plufger soltara un zapatazo y batiese a Buyo por alto. 1-0 para los alemanes. La cosa no quedó ahí. Justo antes del descanso llegó el 2-0. Una pérdida de balón de los madridistas permitió al Bayern montar una jugada de ataque que concluyó con Hughes metiendo el balón en el área a Eder para que el defensa marcase el 2-0 desde una posición casi idéntica a la del primer tanto de los anfitriones.

El Bayern se fue al descanso con un 2-0 quizás demasiado excesivo para lo que se había visto en la recta final del primer tiempo. El partido se ponía muy cuesta arriba para el Real Madrid. Pero es que la cosa se puso mucho peor nada más arrancar el segundo periodo. A balón parado llegaría una nueva diana para los locales. Falta al borde del área que botó Matthaus. Paco Buyo no llegó a blocar el esférico y el rechace lo aprovechó Wolfhart para perforar de nuevo la meta del equipo blanco. Minuto 46 y 3-0. Ahora ya no es que se pusiese cuesta arriba el partido, es que la eliminatoria empezaba a complicarse muchísimo. Y lo peor es que estaba muy reciente el recuerdo del 4-1 del año anterior...

El Real Madrid recuperó la esperanza con un gol 'de pillo' del Buitre. Ante la presión de Hugo, el defensa Eder cedió a su guardameta Pfaff pero Butragueño, que estaba cerca, interceptó el balón y consiguió elevarlo para batir al arquero por encima. ¡Gol del Real Madrid! 3-1 que Butragueño celebró de manera más efusiva que en otras ocasiones. No era para menos. Se trataba de un gol importantísimo.

Aunque el marcador seguía siendo favorable a los alemanes, el 3-1 maquillaba un poco el resultado y suponía marcar un gol fuera de casa. Tal y como se había puesto el partido con el 3-0... Poco después Míchel fue objeto de un claro penalti pero, de nuevo, el Sr. Casarín se desentendió perdiéndose en el limbo lo que hubiese podido ser un 3-2 desde los once metros.

Pero el choque no había terminado. Y hubo un gol más para el Real Madrid. El partido estaba casi acabando cuando el Real Madrid dispuso de un libre directo desde la izquierda. Se encargó de ejecutarlo Hugo Sánchez. La verdad es que estaba bastante escorado y, a priori, parecía más lógico centrar al área que disparar directamente a puerta. El mexicano, sin embargo, optó por el disparo. Lanzamiento raso con la zurda del delantero, prácticamente a las manos de Pfaff... Pero, incomprensiblemente, el portero belga no atrapa el balón y el esférico se cuela en la portería del Bayern. Obviamente fue una 'cantada' increíble del guardameta. Daba igual, en cualquier caso, era gol para el Real Madrid. ¡El 3-2! Hugo efectuó su clásica voltereta y sus compañeros corrieron a festejarlo con él locos de alegría. 

La eliminatoria seguía siendo favorable para el Bayern, pero el resultado era muy bueno para el Real Madrid de cara a la vuelta. Sobre todo, insisto, teniendo en cuenta que el partido llegó a ponerse 3-0 para los muniqueses. Gracias a aquella reacción final, el Real Madrid se llevaba un 3-2 y le bastaría un 1-0 en el Bernabéu para pasar de ronda. Todo se decidiría en dos semanas, en el Santiago Bernabéu. Sería el 16 de marzo de 1988. 

BAYERN MUNICH: Pfaff, Flick, Eder, Nachtweith, Pluger, Mattaus, Brehme, Augenthaler, Wolfhart, Hughes y Kogl.

REAL MADRID: Buyo, Chendo, Sanchís, Tendillo, Camacho, Míchel, Martín Vázquez, Jankovic, Gordillo, Butragueño (Santillana, 90') y Hugo Sánchez.

GOLES
 1-0 min. 40 Plufger
2-0 min. 45 Eder
3-0 min. 46 Wolfhart
3-1 min. 84 Butragueño
3-2 min. 89 Hugo Sánchez